Cortometraje según su procedencia etimológica deriva del término francés court-métraje (película breve).

Para nosotros el cortometraje es cultura, es cine. No importa la duración de una historia contada con imágenes en movimiento, porque lo importante es lo que cuenta y como lo cuenta. No hay que olvidar que la primera película cinematográfica de la historia, “La salida de los obreros de la fábrica Lumière” (1895) de Auguste Marie y Louis Jean Lumière, duró tan solo 46 segundos.

Los cortometrajes han sido una forma de arte popular desde los primeros días del cine y son una parte importante de la industria cinematográfica actual porque tienen un valor incalculable como instrumento de aprendizaje e iniciación para todos los profesionales del sector y cineastas del futuro. Además, son un medio de expresión con identidad propia donde la libertad creativa le permite a sus autores alejarse de las formas convencionales impuestas por la industria y experimentar con la narrativa, la estética de las imágenes, el lenguaje cinematográfico, etc.

Los “cortos” no son un producto comercial y los festivales de cine somos el mejor escaparate, y a veces el único, para poder mostrar toda esta calidad creativa, y ver la respuesta del público a las diferentes propuestas que nos llegan de todas las partes del mundo, sin olvidar que somos eventos culturales, sociales y festivos.

Nosotros este año hemos decidido dar un paso más en la renovación del festival, para poder volver a restablecer el espíritu con el que nació este proyecto, y que tiene mucho que ver con recuperar las proyecciones de cualquier cortometraje sin importar su formato de producción, categoría, género o temática. Para ello hemos creado nuevas secciones oficiales a concurso y hemos incrementado el valor económico de los premios, a pesar de los problemas presupuestarios con los que siempre nos encontramos, con el objetivo de aumentar la presencia de películas internacionales y la calidad cinematográfica de las mismas.

No es una renovación total, como así nos hubiera gustado, porque no hemos conseguido hacer una gala de entrega de premios como pretendíamos porque las ayudas económicas han resultado insuficientes para ello, y en su lugar hemos preparado una clausura más tradicional, pero no por ello menos importante, ya que vamos a recuperar el acto de homenaje a la persona o entidad que haya destacado por su contribución a la difusión cinematográfica y audiovisual.

En este sentido, este año hemos decidido entregar una Retina Especial muy merecida a Carlos de Cabo por su contribución a la realización de proyectos audiovisuales didácticos y pedagógicos en la década de los 80, a través del programa “Escuelas Viajeras. cine en las escuelas” realizado en colaboración con un grupo de profesores y alumnos del Colegio Público San Andrés -La Borreca.

Igualmente conviene destacar la colaboración de la Biblioteca Municipal “Valentín García Yebra”, dirigida por Jesús Álvárez Courel, como promotor del proyecto de recuperación del Patrimonio Audiovisual de Ponferrada, en la restauración de una de las obras más emblemáticas de aquella época como es la película “Un lugar para el tiempo” (1984) con guion y dirección de Carlos de Cabo, que se proyectará en el mismo acto de clausura y homenaje. Una coincidencia maravillosa en el tiempo, porque en aquellos años Jesús Álvarez Courel comenzaba a realizar sus primeras películas en super-8, y en alguna de ellas tuve la oportunidad de participar en diferentes cometidos. Eran mis primeros rodajes y el origen de mi pasión por el cine.

Gracias a tod@s por seguir confiando en “Mi Retina me Engaña”.  Feliz 22FICP (2024)

ANTONIO DONÍS
Director del Festival Internacional de Cine de Ponferrada